Zapata Recording Studios, una historia tapatía

Sobresalir en la industria de la música en los años setenta, desde una ciudad como Guadalajara en ese entonces, era una hazaña. El guitarrista, compositor y cantante Javier Martín Del Campo, también conocido como “Javis”, fundó el icónico grupo La Revolución de Emiliano Zapata en 1969, junto con cómplices amigos, y a lo largo de cincuenta años ha sorteado tendencias y cambios tecnológicos para acomodarse en una actualidad que lo respeta. Recientemente, lanzó tres producciones de su banda, prepara un álbum solista y fue estrenado un documental sobre la historia de la agrupación. Javis nos recibe en las instalaciones de Zapata Recording Studios, el cual instaló hace años en su casa y que actualmente opera al lado de su hijo Luis Ángel, productor y guitarrista del rapero Sabino. 

Del cine al escenario

“La primera vez que tuve contacto con la música fue cuando tenía siete años”, recuerda Javis.  “Vivíamos en San Luis Potosí, y un día se quedó a dormir un primo mío en casa. Creo que mis papás habían tenido una noche bohemia o algo así, la noche anterior, y a la hora que nos levantamos, encontramos dos guitarras en la sala. Sin dudarlo, las tomamos y empezamos a hacer cosas con ellas. Nos sentimos tan chidos que dijimos “vámonos de gira”, tomamos un camión urbano y nos fuimos a tocar. Creo que a la gente le caía bien que éramos unos chavitos y sabíamos tocar. Sacamos “Popotitos” y nos ganamos veinte pesos. Fue una travesura, pero de ahí me gustó el instrumento, y no fue sino hasta que casi en los años sesenta, la familia se fue a vivir al entonces llamado Distrito Federal. A mí me gustaba el rock y oía a Bill Haley y sus Cometas y Chuck Berry, y mi mamá y mi hermana me llevaban al cine a ver las películas de estos músicos y era como un concierto. Toda la gente se prendía, porque era lo único que había”.

Nasty Sex

Javier Martín del Campo narra la emigración a la Perla Tapatía: “Nos venimos a Guadalajara, debo haber tenido once o doce años. Yo escuchaba mucho la radio, ya que nos podemos jactar de que siempre hubo muy buena radio aquí. Luego, en la colonia Jardines del Bosque, los amigos nos juntábamos a guitarrear. Fue una época muy buena. En ese entonces yo tenía como 16 años. La etapa previa a formar la banda fue buenísima. Éramos fans de los Spiders, cada fin de semana había una tocada y no nos las perdíamos. Ahí nació la idea de hacer el grupo. En algún momento hubo un concurso de una radiodifusora que convocaba al talento local, y cada uno de los grupos grabó un tema. Nosotros grabamos “Nasty Sex” y ganamos. De ser los chavos que soñaban con la banda de rock, a los tres meses ya estábamos de gira, porque uno de los premios era firmar con una compañía de discos, y Nasty Sex fue un éxito, primero local, luego nacional y también internacional”.

“Donde grabamos la canción era una cabina de radio. No estoy seguro si haya sido estéreo, ya que eso fue en 1970. Grabamos a dos canales y todo en vivo. El ingeniero hizo sonar a la banda y nos sentimos muy bien. Después, cuando la compañía Polydor nos firmó, nos fuimos al Distrito Federal y grabamos todo el disco en el estudio de la compañía, que en ese entonces era de ocho canales, sobre la calle Miguel Ángel de Quevedo. El ingeniero se apellidaba Guadarrama. Y también recuerdo otros estudios, como LAGAB, en el que grabamos años después”, continúa Javis.

Tecnología y producción

La comunión con la tecnología de ese tiempo se dio: “empecé a hacer cosas entre dos caseteras y hacía doblajes. Después me compré una grabadora Tascam de casete de cuatro canales. En aquel tiempo compré una cámara análoga, que tenía una cinta que daba un loop como de dos minutos más o menos. De esta manera fui doblando cosas y esa fue mi primera experiencia grabando. Cuando empezamos a hacer algunas giras a Estados Unidos pude comprar una de las primeras computadoras para grabar MIDI, una Atari ST. Posteriormente adquirí una grabadora de carrete de ocho canales. El código SMPTE era vaciado en un canal de la multitrack y de esta manera se sincronizaba la grabadora con la computadora. Duré dos años trabajando de esta manera, fusionando lo análogo con lo digital, hasta que empezaron a salir otros programas que empezaron a grabar audio, y esa fue mi transición, la cual me abría todas las posibilidades del mundo. Creo que toda la parafernalia de plug-ins y la tecnología que va avanzando es buena herramienta, aunque cuando hago algo, trato de hacerlo yo, no a través de una máquina”.

“Soy un fanático de los loops, pero hay que tratar de hacerlo lo más vivo y honesto posible. En mi paso por los estudios en los que grababa, veía como trabajaba uno y otro. Aprendía de todo, e íbamos mucho a Estados Unidos, entonces tenía la forma de traerme lo último. Este estudio lo tuve durante mucho tiempo en un cuarto, como estudio de locución, en cinta, para radio y publicidad. En ese tiempo hice muchos jingles, lo cual me dio un background muy importante, porque aprendes todo tipo de música. Mi estudio era como mi altar”.

Generaciones

Javis aborda el tema de la herencia cultural a su descendencia: “Mi hijo menor, Luis Ángel, se hizo músico a raíz de que a los cuatro años la regalamos su batería. En la escuela empezó a estudiar producción y armonía, y también le enseñé muchas cosas. Actualmente es buen baterista, toca el bajo, la guitarra, todo tipo de percusiones y está muy clavado en la producción. Un día, me dijo que quería modificar el estudio. En un principio no accedí y pensé que estaba muy a gusto así. Una semana completa me sentí mal por no acceder, hasta que finalmente lo hice. Entonces él se metió y estuvo un año, físicamente haciendo todo el trabajo, comprando la madera, asesorado por gente que sabe de acústica. Actualmente, el estudio está sonando muy bien y se han hecho cosas muy interesantes. Hace aproximadamente un año se nos unió Guillermo González, quien es el ingeniero residente junto a Luis, quien muy seguido se va a girar con Sabino. Los veo grabar y tienen técnicas completamente nuevas, mientras que yo me dedico a administrar, aunque también hago mis grabaciones, siempre asesorado por ellos”.

“El futuro es prometedor; actualmente está generando muchos proyectos. Estamos creciendo y comprando nuevos equipos, y hay que seguir actualizándolo”.

Javis cierra nuestra entrevista dando una recomendación a las nuevas generaciones: “Para los jóvenes, prepárense porque la competencia cada vez está más fuerte; sobre todo, pongan el corazón por delante”.

Rider Zapata Recording Studio

  • True analog desk Soundtracs MRX Series 24 canales
  • Tube Preamp Universal Audio Solo/610
  • Compressor Dbx 163x
  • Finalizer TC Electronic
  • Antelope Zen Studio 192khz
  • RME Babyface w/Digicheck
  • Logic 10
  • Ableton Live 10
  • Suite plug-ins UAD
  • Monitores de campo cercano Dynaudio Bm6 MkII
  • Monitores de campo cercano Yamaha NS10 Vintage
  • Monitores de campo cercano Auratone Classic Stereo
  • Monitores de campo medio JBL 4411 Control Room
  • Audífonos Sennheiser HD300 Pro
  • Audífonos KRK 8400 Pro
  • Audífonos Roland RH50
  • Micrófonos
  • Neumann U87 Vintage, Neumann U89 Stereo pair Vintage
  • MD421 Stereo Pair vintage
  • Behringer B1, C4
  • Shure SM57, SM58
  • Snake 16 Channels
  • Backline
  • Fender Pro Reverb Vintage
  • Mesa Boogie
  • Bass amp Peavy 112
  • Roland Vocoder svc350 Vintage
  • Kirg Sampling Delay SDD2000
  • Alesis Midiverb
  • NI Maschine Custom
  • Hohner Pianett 1950
  • Fender Jazz Bass Vintage
  • Korg Karma Synth