Malena Durán parafrasea a Óscar Chávez para explicar el proceso que vive actualmente como intérprete y compositora: “Para que siga siempre vigente, hay que reinventar la música”.
La cantante mexicana superó sus propios temores y en su tercer álbum, Atréveme (2013), debutó como autora de algunas de las piezas que dan vida a la mencionada producción discográfica, en la que muestra los diferentes matices de su voz en un experimento sonoro que oscila entre el blues, jazz, reggae y los ritmos afroantillanos, sin abandonar sus raíces mexicanas a través de ritmos como el son, el bolero, el huapango y la canción ranchera.
“Atréveme es el resultado de mis últimos seis años en Mérida, haciendo equipo de trabajo con Arturo Guzmán, mi esposo, quien es músico, productor, arreglista y compositor. Empezamos a explorar qué quería hacer y decir para una siguiente producción y cómo hacerla a partir de vivir en la Península de Yucatán”, cuenta Malena en entrevista. “Hemos tenido la fortuna de contar con grandes talentos yucatecos y también con personas que tienen estudios de primer nivel. Aquí en la Ciudad de México echamos mano de la gente con la que he tenido el gusto de trabajar como Gerardo Bátiz, que ha sido mi director, Evangelito Chacón y otros grandes músicos como Marco Morel, un gran guitarrista mexicano”.
Para esta nueva aventura, además de incursionar como intérprete, Malena Durán eligió a grandes autores que representan la sustancia de la música popular mexicana: José Alfredo Jiménez, Pepe Elorza, Rafael Mendoza, Armando Rosas, Jorge Buenfil, Angélica Balado, Maruchy Behmaras, Axel Ordaz y Miguel Ángel Godínez. Los arreglos de las piezas elegidas corrieron a cargo de Arturo y Omar Guzmán (hermanos, músicos y reconocidos arreglistas), Marco Morel, Gerardo Bátiz, Ángel Chacón.
Emociones plasmadas
“Algo que yo me he planteado a lo largo de mi carrera como cantante, es que para mí es muy importante la raíz. De la música mexicana, los compositores contemporáneos mexicanos son la vanguardia de este país y me parece que dicen cosas muy importantes y son valiosos para la herencia de la música popular, y por cuestiones de mercadeos, de medios, o razones económicas, no tienen el aforo, no hay espacios ni en televisión ni radiofónicos para que sean escuchados”, señala la artista. “Por ende también mi trabajo no ha sido masivo, tiende a estar más en estaciones culturales. He tenido el placer de ser programada en estaciones como Radio Educación el IMER, en Radio Ciudadana y otras estaciones afiliadas, pero siempre creo que mi directriz musical tiene que ver con ese otro México, que me parece que es el que a la larga quedará, habla de una verdad, de una profundidad, habla desde lo más íntimo que tiene que decir un compositor comprometido”, apunta Malena.
La grabación fue realizada en la capital yucateca y en la Ciudad de México, y la selección de temas corresponde – de acuerdo con la cantante – a la representación de lo que es y siente ahora como mujer y artista. “La canción Atréveme, que da título al disco, se la dedico a mi esposo. Habla de las dificultades que se presentan en las relaciones de pareja”.
Rafael Mendoza compuso la canción Enteramente para mí, especialmente para Malena. “Me quedó como anillo al dedo por una historia que tuve. Es un bolero sabrosón. Lo que interpreto de José Alfredo, Cuando sale la luna, lo intento hacer con todo el dolor vernáculo. Además de Las ciudades”, detalla la intérprete mexiquense.
También incluyó una composición llamada Las flores en la banqueta, original de un joven músico del DIM, alumno de Omar Guzmán, quien le mandó su canción y decidió darle un espacio en el álbum. “En este disco colabora, entre otros, Armando Rosas y Rafael Mendoza. En él incorporo ese gusto blusero sin dejar de ser yo, es decir, sigo cantando son cubano. Simplemente quise darle un tratamiento a mi música hacia otros sonidos, respetando siempre la esencia de las canciones. Tratando de buscar otros caminos de la música mexicana, reinventándola”, indica Malena, quien hace 15 años participó con el tema En esta tierra en la producción discográfica Mexican Divas II, en la que compartió espacio con Eugenia León, Tania Libertad y Lila Downs.
Sergio Aguilar grabó guitarras y bajo, pero también fungió como ingeniero de audio. “La manera en la que comenzamos a grabar el disco fue que se hacían bases en Mérida, se mandaban los archivos al otro estudio (en el Centro Cultural Xquenda, en la Ciudad de México), y aquí, ya fuera que Omar (Guzmán) o Gerardo (Bátiz) llamaban a los músicos que consideraban y grababan con Álvaro Chávez”, detalla.
Con Álvaro, Malena Durán ya había trabajado anteriormente en su disco de 2009 llamado La primera lluvia del año, que compila catorce poemas musicalizados de Jaime Sabines. “Ese disco fue un trabajo difícil porque no todos los poemas pueden hacerse canción, hay que encontrar el poema adecuado para que resulte algo orgánico. En él también colaboraron Omar Guzmán, José Loza, David Haro y David Aguilar”, cuenta.
Más de veinte años de canciones
“Atréveme es un repaso por mi vida; hay anhelos, pero también plasmo con canciones lo que quiero contar ahora. Hablo de la nostalgia, de la muerte, de la vida. Soy intensa por el blues; otra que suplica y una más guapachosa. Es una manera de festejar que llevo más de veinte años en los escenarios”, concluye esta espectacular cantante, quien también ha hecho coros para figuras como Juan Gabriel, Willie Colón, La Ley, Jaguares, San Pascualito Rey, Señor González, Pepe Aguilar y Salvador “El Negro” Ojeda.
Como una de las cantantes más destacadas en la escena del son y la música mexicana, Malena Durán fue invitada por la Embajada de México en Austria para la inauguración de la exposición pictórica Una excursión mexicana en 2007. Datos para la historia: hace 22 años pisó por primera vez el escenario del Teatro de la Ciudad Esperanza Iris al lado de la legendaria agrupación mexicana de blues Real de Catorce.
Redacción: Natalia Cano