El día que entrevisté a Chick Corea 

Por Jairo Guerrero* 

Este mes se celebra un aniversario más de “Return to Forever”, el sexto álbum de estudio de Chick Corea (12 de junio de 1941 – 9 de febrero de 2021), que marcó un momento clave en su carrera y es ampliamente considerado uno de los álbumes más importantes en el género del jazz fusión. Con esta excusa en mente, quise sacar del cajón de mis recuerdos una corta entrevista que le hice a este gran protagonista del jazz en 2001 en Bogotá, Colombia, cuando me desempeñaba como periodista y columnista de música para diversas revistas y periódicos locales y que nunca fue publicada hasta ahora. Pero antes de ir a esta anécdota musical de mi vida, me tomaré primero un par de párrafos para contarles un poco de la vida de este músico enorme.

Para comenzar

Armando Anthony, así lo nombró su familia. El mundo musical lo conoció como Chick Corea. Un hombre a quien los años vieron convertirse en una de las figuras clave del jazz contemporáneo. Entre las tantas vueltas que dio en la vida, una de ellas lo enredó como miembro de la banda de Miles Davis, donde vio nacer lo que se conoció como jazz fusión; un género musical que se desarrolló en los sesenta y que abrió la ventana a los músicos que comenzaron a combinar armonías de jazz improvisándolas en fusiones con rock, funk y rhythm and blues. Armando fue considerado uno de los más grandes pianistas que emergieron del jazz en la época post-John Coltrane.

En 1972, Chick Corea lanzó “Return to Forever”, uno de los álbumes pioneros del género de jazz fusión, combinando elementos de jazz, rock, funk y música latina. La banda Return to Forever, liderada por Chick Corea, incluía a destacados músicos como Stanley Clarke en el bajo, Joe Farrell en el saxofón y flauta, Airto Moreira en la percusión y Flora Purim en la voz y percusión. Fue un álbum que innovó en el uso de instrumentos: Chick Corea utilizó teclados eléctricos, específicamente el Fender Rhodes, lo cual era innovador para la época y contribuyó al sonido distintivo del álbum. Este disco representó un cambio significativo en la dirección musical del músico, alejándose del jazz más tradicional hacia un sonido más experimental y eléctrico.

Muestra de esto fue prácticamente toda su discografía que le sucedió desde ese trabajo, llegando hasta el disco que me hizo coincidir con él: “Change”, un álbum donde presentó a su banda Origin y que se caracterizó por su enfoque en el jazz contemporáneo y la improvisación. Justamente fue este, el álbum número 55 de su carrera, el que lo llevó de promoción a Colombia en 2001, donde tuve la oportunidad de entrevistarlo. Aquel año, Chick Corea se presentó en este país como parte del Festival Internacional de Jazz del Teatro Libre de Bogotá, uno de los eventos de este género más importantes de Colombia. La actuación de Chick fue un hito importante, ya que atrajo a una gran audiencia y contribuyó a elevar el perfil del festival y del jazz en la nación.

Ésta es la historia de esa entrevista y aquí la tenemos. Fue el día que me senté para hacerle cuatro preguntas con Chick Corea.

Para esa época, yo hacía reportería musical para algunos medios como el diario El Espectador y Pulse Latino de Tower Records. Mis oídos por aquellos años se nutrían de un viejo nuevo sonido que de repente estaba en boga: el acid jazz. Esa fue la razón que me llevó a conseguir una corta entrevista con Chick Corea.

Fui notificado como staff de prensa tres horas antes de la entrevista y, como investigador policiaco de una vieja película del FBI, llegué con lo único que pude tener a mano para guardar memoria de ese momento: una pluma y una libreta. No hubo tiempo de más. La entrevista estaba limitada a cinco preguntas, no porque así lo pidiera el artista, sino porque la disquera quería que descansara, pues acababa de bajarse prácticamente del avión. Mi entrevista tuvo entonces cuatro preguntas y nunca fue publicada en ningún medio hasta hoy.

Estas notas las conservé con otros apuntes periodísticos de la época y hoy, en medio del luto que aún se respira por su partida hace tres años, la he transcrito para ustedes. Más que una entrevista, se sintió como una corta, pero profunda plática, y Chick Corea, de respuestas directas y sabias, nunca dejó de sonreír. Vibraba amabilidad (tal como se ve en sus fotos).

Este mes se celebra un aniversario más de “Return to Forever”, el sexto álbum de estudio de Chick Corea (1941 – 2021), que marcó un momento clave en su carrera y es ampliamente considerado uno de los álbumes más importantes en el género del jazz fusión.

Primera pregunta (en varias partes)

Chick, eres parte de todo el movimiento Fusion Jazz en varias partes, pero, ¿qué opinión te merece el Acid Jazz como nueva fusión nacida en Londres?

“El único acid jazz que realmente conozco es el que hizo Miles Davis, y el que hice con él para el disco “Bitches Brew”. Eso era ácido. Lo que veo ahora es que hay nueva música en este género que mencionas, que de jazz lo que tiene son algunos acordes de trompeta y piano. En ese sentido, aplaudo que otras vertientes de la música se interesen en el jazz, como el grupo Incognito, y le den una cadencia más rítmica”.

¿Estarías dispuesto a trabajar en algún proyecto de lo que llaman Acid Jazz hoy en día?

“No lo creo. Tal vez haría alguna colaboración con intervención de piano, pero en ese sentido yo soy muy purista y prefiero trabajar en mis propias fusiones”.

¿Usarías loops en tu música como lo hacen estas corrientes?

“Mi música está llena de loops, son las armonías y los ritmos que se repiten en mi música. 

(Algunos en la rueda de prensa se rieron de mi pregunta, porque parecía obvia, pero Chick entiende el punto que no entienden quienes rieron y remata diciendo: “Si te refieres a loops procesados y pregrabados para acompañar la música, no lo he hecho, pero no estoy cerrado a ello”.

Segunda pregunta

¿Esta presentación que harás coincide con el último álbum que hiciste antes de los discos de “Solo en Piano”? Me refiero al álbum “Change”.

“Evidentemente tocaré algo de este trabajo, pues en él experimenté algunas fusiones con flamenco que me interesa mostrarle al público, pero por ser mi primera vez en Colombia, improvisaré un poco en la historia y seguro hasta pasajes improvisados de Thelonious Monk o Bud Powell sonarán en el intermedio de algunos bloques de mi concierto”.

El único acid jazz que realmente conozco es el que hizo Miles Davis, y el que hice con él para el disco ‘Bitches Brew’. Eso era ácido”.

Chick Corea.

Tercera pregunta

¿Qué esperas del público colombiano? Este es un país ciertamente alejado del sonido jazz, y aquí, los puristas o asiduos a esta música no son muchos.

“Tengo como referencia el festival de Bogotá “Jazz al Parque”, donde han estado algunos músicos que conozco, pero creo que el reto real no lo tengo yo, lo tiene el público en el sentido que deben ser open mind y disfrutar de este concierto. Estoy feliz de conversar con ellos a través de mi trabajo. Además, qué bueno que preguntaste acerca del álbum “Change”, porque sin duda este trabajo es supremamente amigable y divertido en términos musicales y seguramente echaré mano de muchas de sus canciones. Así que todos la pasaremos muy bien”.

Cuarta pregunta

El jazz del que vienes elevó la técnica a un nivel de excelencia. Músicos como los que surgieron a la par tuya son únicos en su clase y difícilmente aparecerá otra generación como esa. ¿Queda algo por hacer para los que quieren seguir esta senda musical?

“¡Qué pregunta tan compleja! (pasan unos segundos antes de responder). La música es una cultura y estoy convencido de que la cultura es un organismo vivo. Aprende de sí misma y evoluciona en sentidos y caminos que no imaginamos. Tú hablabas del acid jazz; bueno, eso es una evolución en cierto sentido, y en ese rango surgirán leyendas. Tal vez en el jazz del que vengo no suceda, las leyendas ya se hicieron ahí, pero en el nuevo jazz hay muchas opciones y seguramente en ese nuevo territorio nazcan nuevas e importantes voces del género”.

A continuación, podrán escuchar el disco “Changes”, que Chick Corea presentó en Bogotá en aquel 2001.

¡Gracias por leer!

*Con más de 30 años de experiencia en el medio musical como Artista, Productor explorador sonoro, periodista, productor de programas de radio especializada, editor de revistas de música y DJ, Jairo Guerrero es considerado uno de los artistas de música electrónica más reconocidos de nuestro país. Su propuesta sonora abarca desde ritmos para la pista de baile, hasta ensambles como Techxturas Sonoras, que generan puentes entre la música electrónica y la literatura.
Es miembro de la Academia Latina de Grabación Latin Grammy además de haber sido nombrado mejor Productor y Dj de House en México por los DWMC Awards México y haber obtenido el primer lugar en el MXP4 de Ministry of Sound en Londres. Contacto: www.soyjairoguerrero.com