La Barranca, banda liderada por el guitarrista José Manuel Aguilera, a partir de su brillante incursión en la escena musical con el álbum “El Fuego de la Noche” (1996), se ha convertido a través de veinticinco años en un taller musical por el que han desfilado talentosos músicos y ha construido una prolija trayectoria sin concesiones a sellos y estándares. Ante la crisis sanitaria, Aguilera tomó la iniciativa de echar mano de los recursos que las recientes tecnologías a distancia han aportado a la cultura y al espectáculo y así surgió la producción de su nuevo álbum “Entre la Niebla”, creado enteramente en este extraño periodo de la humanidad. La necesaria presentación en sociedad del trabajo no fue la excepción y la actual formación del grupo, integrado por Aguilera (voz, guitarra, loops y sintetizadores extras), los hermanos Adolfo (guitarra y Prophet) y Ernick Romero (bajo, contrabajo, bajo Moog y coros), Yann Zaragoza (piano eléctrico, piano y sintetizadores) y Abraham Méndez (Batería y percusión), acudieron a ocupar la caja escénica del Teatro Diana de la Universidad de Guadalajara, para realizar su primer show por streaming, el cual se convirtió en el primer espectáculo oficial en vivo de La Barranca en esta modalidad.
El álbum
José Manuel Aguilera narra la línea de producción, desde la génesis del álbum: “No soy un consumidor habitual de noticias y desconfío de las redes. Quizás fui uno de los últimos que se enteraron a ciencia cierta de lo que sucedía actualmente. Al principio reaccioné con extrañeza y con una dosis de incredulidad, pero fue hasta que las víctimas empezaron a estar cada vez más cerca que me di cuenta de la magnitud. Después de reflexionar, pensé que a nivel personal y de grupo teníamos que dar una respuesta creativa a este entorno que nos tocaba vivir. De ahí salió la idea de hacer este disco de La Barranca que se llama ‘Entre la Niebla”.
El show
Prescindir del concierto en vivo quedaba fuera de la ecuación, por lo que José Manuel recurrió a viejos aliados y a internet para lograrlo: “Hacer este streaming se convirtió en la única posibilidad que tuvimos para adaptarnos a las circunstancias. Ya había pláticas con la UdG para hacer un concierto presencial en el Teatro Diana antes de que el confinamiento y el disco existieran. Obviamente, esta posibilidad quedó cancelada y lo fuimos posponiendo hasta que llegamos al fin de 2020 y definitivamente decidimos incursionar en este formato”.
Ana Teresa Ramírez, directora del Departamento de Producción y Difusión Musical de la Universidad y productora ejecutiva del recital, nos plantea los factores que los orillaron a producir en este esquema digital: “Éste fue nuestro primer evento de venta por streaming. Para mí ha sido muy interesante, ya que este concierto fue un trabajo muy detallado y cuidado, en nuevas formas y diferentes estructuras. Esto implicó buscar elementos como un director de arte, diseño y dirección de cámaras y el equipo técnico que requiere esto para hacer un trabajo creativo de calidad, ya que no hay nada que sustituya la energía colectiva que tiene el concierto presencial. Para compensar esto, no puedes hacer algo con una o dos cámaras estáticas frente al grupo, ya que la gente se aburriría”.
La estética
La dirección de arte era crucial en el debut de la agrupación y por lo tanto se convocó a un especialista en utilería escénica. Enrique Morales “Chester” fue el elegido, y él mismo nos narra el contexto de su labor: “Ana Teresa Ramírez fue quien me hizo la invitación, pensando en que fuera alguien local, con acceso a mobiliario y equipo necesarios. Mi contacto directo fue el guitarrista Adolfo Romero, quien me planteó que no se deseaba que pareciera un teatro y que tocarían en un formato circular, con telones negros alrededor. Solicité me enviaran el arte del nuevo disco y que me indicaran la intención: presentar el disco, o hacer un pase por los veinticinco años de la banda, lo cual finalmente fue una combinación de ambos. Ellos tenían una idea de tocar entre cirios, tapetes y mallas de luces colgadas. Trabajamos con mobiliario vintage y artículos como máquinas de escribir, lámparas de pie, sillas; objetos que remitieran a un espacio de creación, como su hogar personal. Yo eché mano para todo esto de la empresa de utilería de Rogelio Zepeda, que cuenta con una gran cantidad de elementos escenográficos para teatro. También tuve la idea de ver las portadas de los discos de la banda en distintos lugares del set. Se sugirió a Alex Aguilera, —el director de cámaras—, que en cada tema musical se mostrara la portada correspondiente, como elementos que ilustraran la trayectoria discográfica de la banda”.
“Chester” prosigue con el tema del decorado lumínico y la importancia de la paleta de colores: “Ellos querían mucha luz. Sugerí en sustitución de los cirios —por seguridad y economía—, esparcir guirnaldas de focos, además de incluir luz testigo que se deja en los escenarios de los teatros para no chocar. Todo el material se realizó en blanco y negro, excepto un tema, así que la paleta se componía de grises. Tenía que buscar los contrastes, lo cual dependía de iluminación. Se lograron imágenes muy profundas y emotivas”.
La luz
Complementando el trabajo de Chester, la labor del manejo de la iluminación se dejó en manos de Iván “Chaka” Escutia, cuya experiencia ha derivado en desempeños para Santa Sabina, Zoé, Calle 13 y Julieta Venegas. “Chaka” nos cuenta el proceso de diseño del show: “Mi trabajo es estar atento a lo que contiene la música y darle coherencia a lo que se está viendo y escuchando. El procedimiento que seguimos en este proyecto para el concepto visual dio inicio por medio de juntas a la distancia, desde la Ciudad de México para intercambiar ideas. Ya con la información, llegué un día antes, vi los elementos que teníamos y tomé decisiones sobre cómo quería usar las luces. Cuando te quitan las robóticas es como regresar al principio. Conté con leekos y las posibilidades con las que juegas son otras: jugar con las intensidades y tratar de ser muy exacto en los momentos. Si haces match con el momento musical, puedes brindar una atmósfera y una coherencia entre lo auditivo y lo visual. En el tema de adaptar la línea de iluminación teatral al streaming, tuvimos las posibilidades de los encuadres de las cámaras y composiciones desde diferentes ángulos, y el movimiento de estas juega muchísimo. Además si el switcheo de las cámaras tiene coherencia musical, el complemento con la luz resulta extraordinario y diferente, te atrapa. El resultado final me pareció increíble”.
El control
La coordinación técnica de “Entre la Niebla” fue realizada por Jorge Infante, “Mexa”, cuyas credenciales en management, booking y producción incluyen los festivales Machaca Fest, Festival Sin Fronteras en Ciudad Juárez, La Lupita y La Barranca, con quienes ha producido el espectáculo “Noche Profunda” y “La Barranca XL”. Jorge interviene para describirnos su función en esta ocasión: “José Manuel me ha dado la injerencia y decisiones para producir shows al nivel de la banda, y este streaming no fue la excepción. Éste era un show nuevo para nosotros y el proceso fue interesante. La gente de la UdG y del Teatro Diana nos apoyó bastante desde su trinchera, con el equipo de Wolfgang Schmidt y Ricardo Serafín. Finalmente, participaron más de cincuenta personas”.
“Mexa” continúa: “Cuando Aguilera me hizo la invitación para producir este show, al principio se habló de un concierto normal, con un stage plot tradicional. Al recibir los primeros riders, tuve la idea de presentar algo en 360 grados. La banda no tuvo muy clara la idea hasta que llegaron al soundcheck y fuimos resolviendo detalles sobre el camino, vinculando cosas en las que había dudas. Finalmente, el resultado rebasó las expectativas propias, tomando en cuenta de que era una primera vez”.
El backline
Estos equipos fueron proporcionados por la empresa Estudio Industrial y su propietario Eder Perales, quien ya había trabajado con La Barranca previamente. Eder nos cuenta acerca de un reto inesperado y cómo lo solucionó: “El staff de la banda está muy bien organizado, por lo cual trabajar con ellos siempre es muy fluido. En realidad no hubo ningún inconveniente mayor, excepto una falla común y fácil de arreglar: una guitarra con ruido, suficiente para ser molesto y arriesgar la grabación. El problema era que se trataba de una pedalera con diez pedales que estaba alimentada casi en su totalidad por un sólo eliminador con daisy chain. Estos eliminadores como el famoso True Tone One Spot son muy prácticos entre los guitarristas; se utilizan mucho porque son confiables y accesibles, pero hay que tener cuidado porque hay pedales que consumen mayor energía que otros. Por otro lado el backline que los músicos solicitaron está seleccionado de manera muy cuidadosa y con muy buen gusto: el Fender Bassman 59 para guitarra, el Ampeg VR vintage de 1971 para el bajo y la batería con bombo de 26 pulgadas. Todos estos son equipos que suenan muy bien y siempre da gusto escuchar a grandes músicos sacando el mayor provecho de ellos”.
El sonido
El óptimo monitoreo en este formato no se puede tomar a la ligera y Edgar “Chilas” Gallardo, con una experiencia de veinte años e ingeniero de La Barranca por ocho años, tiene el necesario conocimiento de los oídos de la banda para lograr un buen resultado. “Chilas” toma la palabra: “En esta ocasión, no había la contaminación sonora propia de los conciertos, ocasionada por la interacción entre PA, monitores de piso y la acústica del lugar. Contamos con in ears, y si bien había monitores de piso y side-fill, procuré tener un nivel que no estorbara para la grabación, además de que el show se hizo a telón cerrado y los músicos encontrados hacia el centro, para procurar la menor interacción entre micrófonos. Algo muy importante fue tener una correcta estructura de ganancia, pues de la consola de monitores salía también la señal para la grabación, así que afortunadamente no tuvimos mayor problema con los niveles. Además contamos con tiempo suficiente para enfrentar cualquier eventualidad”.
La grabación
El registro multitrack lo realizó Arturo “Tuti” Perales, ingeniero de grabación y propietario de Oigo Estudios, centro de producción en el que se produjo en 1995 “El Fuego de la Noche”, la ópera prima de la agrupación. “Tuti” relata: “Por medio de correos electrónicos y mensajes al celular estuvimos en coordinación con los involucrados en la producción. La instalación se hizo un día antes de la grabación y al día siguiente se realizaron las conexiones de la microfonía, las líneas y los sistemas de grabación”.
Perales comparte los equipos utilizados y el montaje realizado: “En este caso fue usó la consola Digico SD5, el Waves SoundGrid con servidor Waves Impact —que nos proporcionó Charly Haro— y dos computadoras; una corriendo el Reaper y otra con el Tracks Live como respaldo. En cuanto a micrófonos, para la batería Ludwig de Abraham se usó el set tradicional clásico de Shure (B52, 57, 58, y 81’s). El bajo de Ernick sonó por medio de línea directa y micro AKG D112 para su amplificador Ampeg. Las guitarras de José Manuel (Vox AC-30) y Adolfo (Fender Deluxe) llevaron el dúo clásico Shure 57 y Sennheiser 421, que previamente pasaban por sus respectivos procesadores y pedales. Los teclados, sintetizadores (Arturia) y computadora de Yann se premezclaron en una mixer y se enviaron por cuatro líneas directas, aparte de una caja de ritmos Arturia y bajo sintetizador”.
“Para la voz de José Manuel se usó el Shure SM7B y para los coros de Adolfo y Ernick fueron los Shure SM55. Se hicieron en promedio dos a tres tomas de cada canción y en ese momento se decidió cuál quedaría definitivamente, haciendo las anotaciones de ajustes para edición y mezcla. La mezcla y máster las hice transfiriendo los audios WAV (24 bits / 48 kHz) a una sesión de Pro Tools HD 9, todo dentro del sistema usando plug-ins de Waves, como SSL, SSL-G, LA-2A, CLA-2A, CLA-76 negro y azul, CLA 3A, H-Delay y otros, además de reverbs, delay, compresores y ecualizadores nativos de Avid y en el máster los UAD2 Precission EQ y Limiter y el iZotope Ozone, con la idea de emular y balancear la sonoridad y mezcla del sonido que hizo en vivo Edgar ‘Chilas’ Gallegos. Lo que se escucha es cien por ciento en vivo, sin afinadores, doblajes o re-grabaciones en el estudio. Me siento muy afortunado de haber participado y haber dejado este registro para la historia musical y de la grabación de Guadalajara”.
El video
Finalmente, las grabaciones visuales de “Entre la Niebla” fueron ejecutadas por Alejandro Aguilar y su empresa Stream Pro, al igual que su transmisión por streaming. La dirección de cámaras fue activada por Alejandro Aguilera, quien narra: “Ana Teresa me invitó a colaborar en la producción de “Entre la Niebla” después de conocer nuestro trabajo de streaming en las producciones de Radaid y Azul Violeta. Yo me encargué de proveer el equipo técnico y humano: cámaras, switcher, monitores, dolly, grabador y codificador, y durante la producción coordiné al crew de la operación para la captura en video y el streaming. A mí me tocó operar directamente el switcher de video y la grabación.
Una vez que recibimos del editor el material, hicimos el streaming en la plataforma de Cultura UDG. La Barranca decidió alinearse de forma concéntrica. Eso implicó que la ubicación de las cámaras y dolly fuera en el exterior del círculo que formaba la banda. Si bien no fue un reto tan complicado, sí requirió organizarnos de una manera diferente tanto de iluminación como de video, ya que normalmente los conciertos se toman con las cámaras frente al escenario y alguna que otra dentro del mismo”.
José Manuel Aguilera nos expresa su satisfacción ante el resultado final, y finaliza: “Creo que a fin de cuentas, el espectáculo superó las expectativas de todos, y todo el equipo que participó está muy contento por el resultado y muy orgulloso de haberlo hecho”.
Iluminación
- (24) Strip Lite 32 bts
- (02) Fresnel 2k Robert Juliat
- (06) Leekos 25/50
- (06) Leekos 15/30
- (06) Guirnaldas
- (01) Consola MA2 Lighting + Fader Wing Rack
- Dimmers marca ETC de 288 canales
Video
- (01) Switcher ATEM TV Studio Pro 4K
- (05) Cámaras de video Canon XF405
- (01) Sistema Teradek Bolt
- (01) Dolly Matthews
- (01) Estabilizador Ronin S
- (01) Livestream Studio software
- (01) Laptop Lenovo Legion Y720
- (07) Intercomms Eartec
Fotos de show: Yorch Gómez y Andy Jiménez
Fotos de montaje: Cortesía de Stream Pro, Iván “Chaka” Escutia y Andy Jiménez