Shambhala Music Festival cumplió 19 años de realizarse y así es uno de los festivales musicales más populares en Canadá. Ocupando más de dos mil metros cuadrados en las montañas Kootenay de la Columbia Británica, Shambhala es una joya de belleza natural y cultural. Los asistentes “vienen a casa” cada año para experimentar la celebración de la música, el arte y las buenas vibraciones de este suceso.
PK Sound volvió a ser parte integral de la experiencia Shambhala de este año, con la cantidad nada despreciable de 300 altavoces en cinco de los escenarios del festival. Cada uno de ellos tuvo su propio ambiente único e inmersivo, con una variante ecléctica de géneros musicales y experiencias. De EDM a hip hop y actuaciones vocales en vivo, los asistentes tuvieron la garantía de escuchar música que les encanta. Los grupos principales y los artistas emergentes por igual tomaron los escenarios para barrer a las muchedumbres lejos durante los cuatro días del festival.
Los staffs de producción de PK Sound desplegaron y operaron cinco sistemas de sonido distintos a lo largo de los escenarios, incluyendo un sistema Trinity en Village Stage. Cada etapa requirió un sistema único debido a los desafíos ambientales planteados por el hermoso paisaje de montaña.
En Village Stage hubo una nueva y más grande disposición para el escenario, que requirió ingenieros de sonido para repensar la implementación del sistema para este año. El área estuvo ubicada entre los imponentes árboles y un nuevo sistema de pasarelas elevadas y plataformas fue renovado para abarcar un espacio mayor, proporcionando a los asistentes grandes oportunidades para experimentar el espectáculo desde varios ángulos y puntos de vista. Para el ingeniero de sonido PJ Miller fue otro paso en la dirección correcta. “Village Stagfue bastante sorprendente este año porque la mayor parte de la estructura que rodeaba el escenario fue reconstruida, por lo que desplegamos una fase alineada en el sistema que cubrió no sólo la pista de baile, sino también las áreas circundantes frente a FOH y las pasarelas”. El equipo de PJ Miller instaló cuatro delays que se sincronizaron con Trinity, mientras que las altas frecuencias en toda la zona del escenario se reforzaron, utilizando grupos estratégicamente colocados de altavoces Klarity 12 y CX215.
En otros dos escenarios, como el Fractal Forest Stage y el Pagoda Stage, fueron creados espacios que entregaron el sonido a todos lados. Fueron colgados varios pares de arreglos lineales en un patrón radial que rodeó el área, dando un total de 32 gabinetes, mientras que para el fueron distribuidos line arrays compuestos de ocho cajas VX12 y subwoofers CX800 duales de 18 pulgadas y un side-fill adicional de seis altavoces VX12 por lado y nueve CX800.