Miguel Ríos cautiva en el Auditorio Nacional 

La leyenda musical originaria de Granada, España, se presentó con lleno en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México, como parte de su gira “Todo a pulmón”. La visita fue posible gracias a la gestión de EME Producciones, encabezada por Rocío Gutiérrez y Fernando Pérez, quienes además de brindar servicios de producción, ahora incursionan también en el booking y la promoción desde su oficina en España. 

La inolvidable velada permitió adentrarse en las entrañas de un staff que ha recorrido, en algunos casos, cuatro décadas los caminos del rocanrol en español, acompañados en esta ocasión por profesionales hechos en México. 

Un crew que disfruta lo que hace

La experiencia de armar esta producción con la guía de EME Producciones resultó en algo maravilloso, como afirma Paula Narea, management de Miguel: “Lo conozco a él y a la banda desde los 16 años, hice coros en varios discos y en el concierto que dio en el 81 en el Pabellón del Real Madrid. Mi hermano Carlos ha sido productor de sus discos, así que tenemos una relación casi familiar y cercana donde ahora, mi sobrino Pablo es el baterista. Es la primera vez que vengo como su management y ha sido maravilloso traerlo a un Auditorio Nacional lleno y hacer la producción con EME. Todo el staff y los músicos son de primer nivel y colaborar con ellos fue un lujo, porque trabajan bien y rinden al máximo; disfrutan lo que hacen y lo viven, eso de verdad no tiene precio”.

El antecedente que hizo posible esta visita fue efecto de la pandemia, como cuenta Rocío: “En EME Producciones empezamos a hacer booking desde la pandemia; no era algo que hiciéramos de manera formal, pero empezamos a abrirnos a eso. Abrimos una oficina en España, empezamos a colaborar con artistas españoles y uno de los primeros que abrió la posibilidad fue Miguel, de quien somos super fans y amigos”. 

Desde finales de 2024 se comenzaron las gestiones para tener a Miguel Ríos en México, con una respuesta maravillosa, destaca Rocío: “Anunciamos la fecha en febrero, pero la gestión arrancó con más anticipación al tratarse de un artista internacional; luego empezamos la promoción cuatro meses antes, para tener la venta completa y conseguimos este lleno total, que es fantástico”. 

Paula Narea.
Rocío Gutiérrez, Fernando Pérez y Mario Flores.
Rubén Díaz Toledo y Jorge Solórzano De la Torre
Manuel Camacho.

“Trabajamos la producción y booking a la par. La experiencia me gustó mucho, porque fue diferente en el sentido de que estamos acostumbrados a que los conciertos internacionales llevan mucha producción, pero Miguel venía de hacer el tour “Rock & Ríos y Cía, 40 años después”, que tuvo sinfónica, pantallas y una producción técnica muy avanzada. Cuando hablamos con él para venir a México, nos dijo que quería venir más relajado, sin tener tantas presiones, y por ello tuvimos una producción que parecía más sencilla, nos hizo dudar incluso en añadir una pantalla central, pero nos decía que no quería distraer a la gente, que era suficiente con lo que tenía porque quería hacer algo muy orgánico. La sorpresa es que la gente lo aceptó de maravilla y, efectivamente, se concentró mucho más en lo que hablaba, cómo lo decía y cómo lo cantaba”. 

“Para nosotros fue una novedad, pero fue muy acertado. Cumplimos con tener un buen audio e iluminación y desplegar este concepto más orgánico que nos gustó mucho. Fue muy bueno, porque la mayoría de la gente que trabaja con él es de toda la vida, son como una gran familia”.

Sobre la producción técnica, Fernando, que también es el ingeniero de audio en sala de cabecera de Maná, comparte lo que implicó añadir a profesionales mexicanos en el staff: “El ingeniero de iluminación y monitores de Miguel no pudieron venir y decidimos tomar gente mexicana que son del crew de Maná. La realidad es que se sintieron muy respaldados, porque se trató de gente de gran nivel, que está en giras internacionales permanentemente”.

Con eso resuelto, lo que siguió fue cumplir el concepto minimalista del show, como relata Fernando: “Lo que hicimos fue trabajar una idea de iluminación sencilla, que pintara bien, y para ello decidimos tener un ciclorama blanco atrás para lograr ciertas texturas y ambientes que no distrajeran la atención del público y destacaran a Miguel. Quedó muy bien y le dio cierto matiz a la banda”. 

“Respecto al audio, tuvimos un ingeniero de sistemas que hizo el análisis y movimiento de algunas cajas para cubrir ciertas zonas que sentíamos que se nos estaban quedando desprotegidas. Usamos el sistema del Auditorio Nacional y nos apoyamos con backline y extras de microfonía que nos pedían de España, básicamente para tener más selección de micrófonos y cajas directas. En iluminación, así como las consolas Digico, todo fue rentado a PREES, que nos brindó un gran servicio. Miguel estuvo muy contento. Es un artista muy tranquilo, al igual que su gente. Se le notan los años que lleva sobre los escenarios. Es super profesional”.

Los aprendizajes que se lleva Fer de esta experiencia fueron: “La comunicación con equipos de otras latitudes, en este caso los españoles, porque tienen términos diferentes para algunos equipos y tuvimos que cerciorarnos de estar hablando de lo mismo, además de asimilar los tonos y modos; se desarrolla una especie de psicología para lidiar con todo. Se toma conciencia de estar de este lado y darse cuenta de cómo atender las exigencias de muchas personas para que las cosas funcionen. Ser conscientes de los tiempos y estar al pendiente de proveedores”. 

Audio total

Las tareas en audio se armaron al alimón, con gente de Miguel Ríos y EME Producciones, encabezados por Rubén Díaz Toledo, quien coordinó el área e hizo el diseño de sistemas: “Regularmente hago sistemas para Maná y también me encargo de alistar las consolas para sala y monitores, dejarlas listas y eso fue lo que me tocó hacer en este show. Como en el Auditorio Nacional hay un sistema de PA fijo L-Acoustics, solamente me encargué de checar los sistemas y entregarle al ingeniero de sala de Miguel para que me dijera si se sentía a gusto o cambiar algo”. 

“También me encargo de revisar los riders, hacer escenario, entregar consolas en sala y monitores, radiofrecuencia y checar el PA. Empezamos hace semanas y lo que siempre procuro también es poder tener las consolas antes para cargar archivos; en sala tuvimos Digico, una Quantum 225 de las nuevas de la serie, y en monitores usamos una SD10. Pude hacer los ajustes que se iban a implementar en el Auditorio para que los ingenieros llegaran y se dedicaran sólo a mezclar”. 

En sala, Manuel Camacho tiene el control de los faders desde aquella primera vez en la gira “Rock de una noche de verano”, de 1983, luego de colaborar con bandas como Cucharada, Leño, Alarma, Chano Domínguez, Joaquín Sabina, Los Toreros Muertos, Isabel Pantoja, Andy Lucas, entre otros. “Soy filólogo de formación, pero desde el primer día que pude estar en esto, tuve un sentimiento muy fuerte de estar vivo y ya no quise hacer otra cosa. He vivido con Miguel todo y profesionalmente he pasado de lo análogo a lo digital, incluso ver ese cambio aquí en el Auditorio Nacional. La consola con la que empecé era una MIDAS XL4 o XL3 y luego trabajé mucho con las Yamaha PM3000 y PM5000”.

“Me he ido adaptando conforme las mesas van saliendo y no queda más que estudiar y estudiar. Yo sigo notando el sonido analógico más cálido, pero te adaptas y lo bueno de todo esto es que actualmente puedes traer la sesión que usaste en otro show, sin tener ningún problema. Para mí, el sonido estéreo es como un cuadro en blanco en el que voy pintando colores; primero me hace la paleta el analista de sistemas y con esos colores voy pintando lo que son las frecuencias. Digico me gusta en general por el núcleo que tiene el procesador, además de que una enorme cantidad de plugins y efectos”. 

“En este show tenemos 48 canales, con todo lo que trae la banda -teclados, batería, voces, coros-, hago matrices y efectos, no tengo acá el Waves que usé en España, pero traigo una reverb y un previo. Los plugins nos dan mucha ventaja, no sólo de espacio, sino de procesos como mandar todo por un cable digital y listo”.

Para Manuel, trabajar con Miguel es aprender de la vida. Con él y la música he conocido mucho mundo y sigo disfrutando con él porque tiene una clarividencia sobre la vida y su sentido, su honestidad, su saber estar, su conocimiento y todo te enseña; sus conversaciones son para aprender. Como artista es alguien que me ha puesto la carne de gallina y hecho llorar muchas veces mezclando, de la emoción y alegría de ver lo que consigue”.

En su rol de complemento en monitores, el mexicano Jorge Solórzano comparte los detalles de su labor: “Fernando me invitó porque el ingeniero de monitores de Miguel no pudo venir; yo tenía la fecha disponible, porque Maná paró para tomar un periodo de vacaciones y claro que acepté, sabiendo quién era el artista. Recibí un archivo que metimos a la consola y vimos que todo estuviera bien. Usé una Digico SD10 que ya conocía, porque tengo muchos años usando esa marca; ocupamos una SD7 con Maná y por eso fue muy fácil para mí”. 

“En la prueba me sorprendió la voz que tiene el señor a sus 81 años. En el soundcheck me dijo: ‘súbele al rocanrol, quiero la guitarra, bajo y batería; dale sin miedo’. Fue muy agradable, tenía cierto nervio, pero es muy amable y eso ayudó a que las cosas fluyeran”. 

“Usa monitores a piso muy bajitos, son más un plan B por si se le va el in ear o algo, solo como referencia. Tuvimos in ears de Sennheiser y en microfonía una mezcla de Shure, AKG, Sennheiser y Neumann. Tuvimos 11 mezclas, más side fill y pisos. Sus músicos la tienen clara, saben lo que quieren, están muy amarrados y fluyen bien y rápido. Al final todo se fueron contentos y Miguel muy agradecido”. 

Una oportunidad excepcional

En el área de iluminación, el también mexicano Mario Flores llevó a buen puerto la tarea: “Fue mi segundo show en el Auditorio Nacional pues me he dedicado a dar soporte y capacitación para la empresa de Chauvet Professional, soy uno de sus especialistas. La oportunidad de estar acá con Miguel Ríos vino por parte de un amigo que conocí por Chauvet, Mariano Paulino, con quien colaboré varios años en VARI. Tenemos una relación de amistad y profesional y estaba saturado de trabajo, así que me pidió apoyo y me tocó correr el show”.

“Me gusta trabajar a la manera teatral, tener ciertas ambientaciones. Para mí, lo importante es que se vea al artista y hacer diferentes atmósferas con colores y texturas, usando luminarias como spots y apoyándonos con híbridos que ayudan mucho porque podemos usarlos como spot, wash o beam y lo puedo explotar para diferentes canciones y temáticas. Tuve la gran fortuna de usar la consola Chamsys MagicQ MQ500, que soporta 256 universos vía ARNet; es una mesa muy potente y compacta, tiene dos pantallas táctiles que ayudan para tener el visualizador o el plot y usar con la potencia de los universos el pixel matrix. Así pude añadir el equipo que tienen instalado en el techo del Auditorio para amplificar lo ocurrido en el show”. 

“Para mí siempre será cumplir un sueño el estar haciendo esto en el Auditorio Nacional. Es la segunda vez que lo hago como operador; varias veces estuve como soporte o especialista de marca con Robe, Chauvet y luego Chamsys; estuve en toda la gira ‘Confidencias’ de Alejandro Fernández, así que conozco bien el recinto. Tener la oportunidad de hacer este show esta vez fue increíble”.

Entrevistas: Nizarindani Sopeña / Redacción: Marisol Pacheco

Fotos: Yered Jiménez y Rafael Chaves.

Todo a pulmón: Miguel Ríos en el Auditorio Nacional

Audio Auditorio NacionalPrincipal

L-Acoustics

  • (28) K1, (28) K2
  • (16) K1SB
  • (16) KS28
  • (04) P1
  • (02) Luminex Gigacore 1
  • (04) Luminex Gigacore 26i

Delay

  • (06) Kara

Front-fill

  • (08) X12

Monitores

  • (22) X15 HiQ
  • (02) Arcs Focus
  • (02) SB18m

Side-fill

  • (04) A15 Focus
  • (04) A15 Wide
  • (08) KS21
  • Consola sala (Rider Miguel Ríos): Digico Quantum 225

Control de sala

  • Previo Avalon 737
  • 1 Previo Focusrite ISA 430
  • 1 Lexicon PCM 70
  • 1 TC 3000
  • 1 UPS MGE Pulsar 1000C Rack 68182
  • 1 Tarjeta de sonido Rme Madiface USB
  • 2 Micrófono Shure SM58 con interruptor
  • 1 Altavoz autoamplificado
  • 1 Computadura para gestión de equipo con Smaart + Tarjeta de sonido y mic. de ajuste
  • 1 Router o punto de acceso WIFI conectado a la mesa
  • 1 iPad
  • 1 Altair EF-200 Estación Central de Intercom de 2 Canales
  • 1 Taburete con respaldo y altura regulable

Monitores

  • Altavoces L-Acoustics
  • Monitoreo personal 
  • (12) Sennheiser ew IEM G4, Shure PSM1000
  • (6) Auriculares
  • Consola Digico SD10

Control de monitores

  • 1 Spliter analógico 56 canales
  • 1 Lexicon PCM 70
  • 1 UPS MGE PULSAR 1000C RACK 68182
  • 2 micrófonos SHURE SM58. con interruptor
  • 1 Auricular cerrado AKG HD25
  • 1 Router o punto de acceso WIFI, de gran potencia, conectado a la mesa
  • 1 iPad
  • 1 Taburete con respaldo y altura regulable

Microfonía inalambrica

  • (3) Sistemas Inalámbricos SHURE QLXD24
  • (3) Micrófonos de mano Inalámbricos SHURE SM58 H51
  • (1) Sistema Inalámbrico con petaca con cable a jack macho mono y receptor (en el puesto del bajista)

Microfonía convencional

  • (1) AKG D112, (1) 451
  • (3) Neumann 184
  • (2) Sennheiser MD421, (4) 904, (2) MKE 600
  • (8) Shure SM57, (4)SM58, (7) SM58 (W/S)
  • (12) Cajas directas BSS

Iluminación (renta)

  • Consola Chamsys MagicQ MQ500
  • 49 Chauvet Professional Outcast Rouge, 24 Maverick Storm, 28 Colorado PXL Bar
  • 8 Cegadora Minibruto Elation LED BTW Blinder 700
  • 2 Magmatic Therma Tour 800 oil Based Haze
  • 4 Máquinas de humo Magma Pride de 700W
  • 1 Centro de carga AC para iluminación

Video

  • 1 Pantalla LED LEDEC pitch 2.6 mm
  • 1 Servidor de video con software Resolume Arena
  • 1 Procesador de video NovaPro UHD Jr
  • 1 Centro de carga para pantallas

Input List

Pablo

  • 1- BD out – AKG 112
  • 2 – BD in – Sennheiser E 904 
  • 3 – SN top – Shure SM57 
  • 4 – SN bottom – AKG 451 
  • 5 – SN 2 – Shure SM57 
  • 6 – HH – Neumann 184
  • 7 – Tom 1 – Sennheiser E 904
  • 8 – Tom 2 – Sennheiser E 904
  • 9 – Tom 3 – Sennheiser E 904
  • 10 – OH L – Neumann 184
  • 11 – OH R – Neumann 184

Jorge

  • 12 – Bass amp – Sennheiser MD 421 
  • 13 – Bass DI – DI box 

Luis Prado

  • 14 – Nord stage piano – l – DI box
  • 15 – Nord stage piano – r – DI box
  • 16 – Leslie top 1 – Shure SM57
  • 17 – Leslie top 2 – Shure SM57
  • 18 – Leslie bottom – Sennheiser MD 421 

Basi

  • 19 – Key 1 – L Basi – DI box 
  • 20 – Key 1 – R Basi – DI box 
  • 21 – Key 2 – L Basi – DI box 
  • 22 – Key 2 – R Basi – DI box 
  • 23 – Key 3 Basi – DI box 

Nortes

  • 23 – Guit Nortes l – DI box / Shure SM57
  • 24 – Guit Nortes 2 – DI box / Shure SM57

John

  • 25 – Guit Parsons l – DI box / Shure SM57
  • 26 – Guit Parsons 2 – DI box / Shure SM57

Basi

  • 27 – Coro 1 Basi – Shure SM58 

Nortes

  • 28 – Coro 2 Nortes – Shure SM58 

Jorge

  • 29 – Coro 3 Jorge – Shure SM58  

Luis

  • 30 – Coro 4 Luis – Shure SM58 

Miguel

  • 31 – Miguel – Shure QLXD24/SM58 H51 
  • 32 – Spare voz – Shure QLXD24/SM58 H51 

Invitado

  • 33 – Invitado voz – Shure QLXD24/SM58 H51 

Pablo

  • 36 – Órdenes – SM58 w/s 

Amb

  • 37 – Amb. público L – Sennheiser MKE 600 

Amb

  • 38 – Amb. público R – Sennheiser MKE 600 

Backline

  • 39 – TB backline – SM58 w/s

Mesa mon

  • 40 – TB mon  – SM58 w/s

FOH

  • 41 – TB f.o.h.  – SM58 w/s