Tras siete años de ausencia, Linkin Park, banda dos veces ganadora del Grammy, regresa a la carretera. Su gira mundial, “From Zero”, con más de 50 conciertos, los llevó al Estadio GNP Seguros de la Ciudad de México y llegarán en noviembre próximo a Porto Alegre, Brasil, además de prácticamente a cualquier lugar intermedio, incluyendo estadios y arenas de todo el mundo. “Volver a gira ha sido increíble”, mencionó el cofundador de la banda, Mike Shinoda, en un comunicado sobre el tour. “El apoyo de los fans es abrumador y estamos listos para llevar esta energía aún más lejos por todo el mundo”.
Parte del mundo pudo anticipar lo que estaba por venir cuando la banda realizó una mini gira relámpago a finales del año pasado por regiones clave, donde realizaron múltiples conciertos, incluyendo Europa y Asia. Esta gira también sirvió para presentar a los nuevos miembros de la banda, la covocalista Emily Armstrong y el baterista Colin Brittain, y lanzar los sencillos “The Emptiness Machine” y “Heavy Is the Crown”.
También jugaron un papel clave en la gira un par de consolas Digico: una consola Quantum852 en sala y una mesa Quantum338 en monitores. Ambas compartieron dos SD-Racks (uno a cada lado del escenario y un SD-Mini Rack para la reproducción de pistas) en un loop dual Optocore. A estas se unieron el transform.engine de Fourier Audio con el software v1.3 y transform.suite ‹25 en sala, además de un sistema de mezcla inmersivo de monitores IEM Klang:konductor en el área de monitores. Todo este equipo, centrado en Digico, fue suministrado por el proveedor de tecnología de la gira, Sound Image, una marca de Clair Global. Jim Ebdon, el ingeniero de sonido, es nuevo en la banda y se ríe al recordar la invitación, llena de acuerdos de confidencialidad. “Fue alrededor de abril del año pasado cuando empezaron a preguntar, y por supuesto, nadie nombraba a la banda, ya que era un secreto muy bien guardado”, recuerda, destacando el impacto que la banda quería causar con la nueva alineación. El primer concierto fue privado en septiembre en los estudios Warner de Los Ángeles, y tuvo el efecto esperado. “Fue increíble formar parte de esa experiencia”.
Igual de impactantes son las consolas Digico. No son nada nuevo para Ebdon, quien dice haber adquirido la consola D5 con número de serie cinco al fundador de Digico, Bob Doyle, en 2002. “Me vendió una mientras tomaba un café conmigo en la cocina, en Inglaterra”, recuerda. He sido usuario desde sus inicios y los he usado desde entonces. Me encanta el diseño de la nueva superficie Quantum852. Además de su sonido limpio y presente, la consola tiene una apariencia y un tacto mejorados con pantallas grandes y brillantes. Es un verdadero placer usarla”.
Ebdon dice que también es un gran fan del procesamiento Spice Rack de la plataforma y que usa habitualmente su compresión y ecualización como punto de partida. “Me encanta la configuración predeterminada en cada canal al abrir esa pestaña y me gusta la ecualización”, dice.
La inclusión de la conectividad Dante también marca una gran diferencia en el flujo de trabajo. “Tenemos muchísimas entradas; probablemente mezclo unas 60. También reproducimos directamente desde Pro Tools con Dante y los sistemas de guitarra están todos integrados, así que podemos tomar las divisiones de Dante desde ahí. Contamos con varias copias de seguridad analógicas, así que todos los racks y archivos de sockets están llenos de entradas. También usamos disparadores de batería para poder samplear más tarde o sobre la marcha. Uso mucho los snapshots y macros. Puedo cambiar de entrada, acceder a un conjunto completo de entradas B o C, silenciar algunos canales y activar otros que provienen de un rack completamente diferente. Me encanta poder programar este tipo de cosas para mi flujo de trabajo. La versatilidad es increíble. El Quantum lo gestiona todo a la perfección”, comenta Ebdon.
También ayuda el Fourier Audio transform.engine con el software v1.3 y el nuevo paquete de suscripción transform.suite ‹25; dos de ellos están en sala para una redundancia completa, que Ebdon ha cargado con sus plug ins favoritos, como FabFilter, reverberaciones Valhalla, Fairchild 1176 y LA-2A, y Tube Tech. “Lo cargué con todo lo que suelo usar y, por supuesto, lo que la banda usa en el disco”, explica. “A veces me pedían delays específicos o efectos inusuales y me enviaban fotos de sus plug ins de la sesión real para poder ajustar los parámetros lo más fielmente posible y recrear los efectos grabados en el escenario. Ha sido un éxito rotundo. Sé que Fourier aún está en sus inicios, pero ha sido un proyecto sólido.
Flexibilidad, la clave
En el mundo de los monitores, el ingeniero Pasi Hara está probando un Quantum338, su superficie favorita de la gama, con un sistema de mezcla IEM KLANG:konductor integrado. “La flexibilidad que ofrece el Q338 es increíble para el flujo de trabajo, ya que permite enrutar fácilmente los elementos donde se necesiten, punto a punto, además de compartir los preamplificadores con la sala”, menciona.
El procesamiento se aplica con libertad a los monitores y a Hara le encantan las opciones Mustard y Spice Rack del Quantum338, además de poder acceder al procesamiento Stealth Digital de la consola mediante una aplicación para iPad, lo que le permite estar al tanto de cualquier punto del escenario. “Utilizo una mezcla de ambos, quizá el ecualizador Mustard y luego ajusto con el ecualizador integrado”, explica Pasi. “Hay muchísimas opciones. Me gusta especialmente el ecualizador dinámico Chilli 6. Lo tengo en mis mezclas de alto rendimiento, por así decirlo —miembros principales de la banda—, porque puedo lograr resultados con una latencia menor que la que obtendría enviándolos a un equipo externo o a Waves. Soy muy consciente de la latencia, hasta el punto de medir cada equipo que armo y desmonto, desde la cadena de canales completa, desde un micrófono inalámbrico hasta la maleta de monitoreo personal. Uso Smaart para medir todo el recorrido de ida y vuelta, así sé exactamente qué puedo y qué no puedo tener en línea, así que para mí es fundamental usar un ecualizador dinámico en la consola, añadiendo, digamos, 0.3 milisegundos en lugar de hacer un recorrido de ida y vuelta fuera de la consola y añadir 1.3 milisegundos.
El hecho de que tanto Pasi Hara como Linkin Park sean fans del sistema Klara hace que la flexibilidad del flujo de trabajo del Quantum sea mucho más grande. “La banda ya ha usado sistemas Klang, están familiarizados con él y saben lo que hace”, finaliza Pasi, quien usó la marca por primera vez cuando trabajó con System Of A Down en 2015. “Ha sido como un viaje de diez años para mí con Klang, así que ahora es básicamente parte de mi arsenal en casi todos los conciertos. Digico ya no es solo una consola, sino un ecosistema que marca una gran diferencia cada noche”.
