Compone canciones desde los once años y en la juventud comenzó a cumplir el sueño de verlas salir al mundo. Sophia Mór está armando el que será su tercer disco, en el cual se aventura por primera vez a colaborar con colegas cantautores como Sofi Saar y Juan Vegas.
“Todavía tengo las canciones que hacía en la secundaria, en mi PC enorme con mi micrófono. Sólo las cantaba y las guardaba en una carpeta. Soy mucho de escribir lo que siento, expresar lo que estoy pasando, sentarme y atender mi necesidad de desahogo. Empecé a tocar instrumentos a los 21 años, guitarra y teclado, y con eso pude hacerlo mejor, aunque el proceso es el mismo”, recuerda.
Con experiencia en estudios de grabación como City Sound en Los Ángeles, para este tercer material, Sophia trabaja la producción musical en los espacios de los productores y colegas con los que está colaborando: “Para este disco quise escribir las canciones con alguien más, nunca lo había hecho. El plan es tener los temas con Sofi Saar y Juan Vegas como muestra del disco que voy a presentar más a la antigüita, porque creo que antes se hacía un disco y era una obra completa. Quiero darle esa importancia al disco y el hacer música”.
“Estamos trabajando las maquetas de forma profesional, no sólo yo con mi guitarra. Estoy grabando en muchos lados con productores que son unos genios como Camilo Vélez, Paolo Stefanoni y “El Cahuas”, que traen una onda muy fresca e innovadora, y juntos hacen una mezcla increíble. Con Alfonso Palacios también estoy haciendo cosas en El Cuarto de los Juegos, es mágico trabajar juntos porque nos conectamos y nos entendemos para hacer canciones, produce increíble, lo admiro mucho. Y también estoy haciendo cosas en Naranja Agría, con dos productores muy jóvenes que pusieron su estudio; y también estuve en Madrid, en Capital Sounds, con Antonio Escobar, y salieron maquetas increíbles que seguro serán parte de las canciones de este disco, aunque no las termine él”.
En lo que respecta al proceso de mezcla y masterización, para Sophia es reciente su interés en saber más de esa labor: “Nunca me había metido, pero últimamente he ido entendiendo más su importancia y valor. Es una cosa de gusto personal que puede cambiar por completo el sonido de la canción si el proceso no es el adecuado”.
El camino en la música para Sophia no sería el que es hoy sin la colaboración que mantiene con Sennheiser y Martin Guitar. Así lo valora: “Me siento tan afortunada de estar con ellos porque son mis marcas favoritas y no me la creo que hayan querido trabajar conmigo. Cuando empecé a entender el tema de la microfonía, veía que mis cantantes favoritos usaban Sennheiser y coincidió que cuando empecé a producir mis canciones, ellos acababan de llegar a México. Nos conocimos y me dijeron que buscaban artistas para colaborar. De ahí me enrolé en una gira demo con ellos en camión por Zacatecas, Durango, Puebla y Querétaro para presentar los micrófonos a las tiendas y yo encantada. Ahí me regalaron mi primer micro con acabados de arte huichol y ahora tengo una versión actualizada del EW con cápsula 945. Luego conocí a Jaime Celis y Yanina Quiroz, de Eusica, y comenzamos estas colaboraciones con Martin Guitar, ahora tengo dos guitarras, una de doce cuerdas que además pinté yo con la que grabo y me subo al escenario”.