Leslie Ann Jones

Su larga trayectoria y la alta calidad de sus grabaciones hacen de Leslie Ann Jones una de las ingenieras de audio más respetada en la industria del audio profesional. Hija del baterista Spike Jones y de la cantante Helen Grayco, desde pequeña se adentró en el mundo de la música, pasando por diferentes facetas. Ya estando establecida en la industria de la grabación, ha sido la encargada de grabar importantes producciones discográficas para importantes disqueras. Algunos nombres de artistas que sobresalen de su larga lista con los que ha trabajado son Herbie Hancock, Charlie Haden, B.B. King, Carlos Santana y Wayne Shorter. Hablando sobre películas en las que ha tenido una importante colaboración figuran Apocalypse Now, Requiem for a Dream y The Company, entre otras.

La historia de Leslie Ann Jones también incluye por supuesto galardones, como el Grammy por mejor grabación de música clásica por el disco Quincy Porter: The Complete Viola Works, con los artistas Eliesha Nelson y John McLaughlin Williams. En el transcurso de su carrera ha trabajado en los estudios ABC, The Automatt y Capitol Records y en la actualidad es la directora de grabación y scoring en Skywalker Sound, la mítica compañía establecida en San Francisco fundada por George Lucas y que está dedicada a la grabación de música sinfónica para películas. Las palabras se quedan cortas para describir a esta personalidad, que además tuvimos el honor de recibir en México durante la Conferencia Anual de AES México, realizada en sound:check xpo 2013 y es por eso que dejamos en su propia voz las experiencias que nos compartió, en esta entrevista exclusiva, festejando el fin de año con esta personalidad.

¿Cómo fue que entraste al mundo del audio?

“Yo empecé tocando guitarra a temprana edad. Tenía un grupo musical con mis primos en donde también hacía coros. Desde pequeña yo estaba segura que me dedicaría a la producción musical; en esa época pensaba que como productora sería importante saber sobre el mundo de la ingeniería en audio y así fue como comencé a hacer audio en vivo para diferentes grupos. Después de un año me di cuenta de que me gustaba mucho esa área y fue así como me profesionalicé y llegué a ella. Por otro lado, un aspecto muy valioso para mí fue tener la formación de músico y poder leer partituras; eso me ha ayudado mucho al afrontarme a proyectos muy demandantes. Otro factor importante es poder ver tal cual la música impresa y ver cómo interactúan cada una de las partes que conforma la partitura, ya que ahí se encuentran las dinámicas que uno debe respetar, ahí esta la información vital. Creo que actualmente la gente destina demasiado tiempo a estar viendo el monitor de la computadora y no escucha la música. Realmente lo que se ve en la computadora no es la música, sino una representación del sonido.

Tú empezaste grabando con una Tascam de cinta de media de pulgada de cuatro canales; ahora en nuestros días puedes grabar cientos de canales. ¿Qué opinas del rápido crecimiento tecnológico?

“Como en cualquier cambio, la tecnología trae cosas positivas y negativas, esto es porque cada vez hace que las cosas sean más fáciles de hacer; hay gente que no aprende realmente el arte de grabar y sólo conecta un micrófono y presiona grabar. Además, por la cantidad de canales que podemos grabar, hoy en día es más fácil poder corregir algún error que hayamos tenido al momento de grabar. Por esto yo pienso que ha bajado la educación y la preparación del ingeniero en audio. Algo que descubrí hace no más de un año es que al hacer en la actualidad grabaciones analógicas tengo que cambiar mi forma de pensar, ya que en el formato digital actual, al ser tan claro y prístino no pueden ser utilizados tantos micrófonos de bulbo, que tienen su propio nivel de ruido y que en el modo analógico sí funcionan muy bien”.

“Ahora, la parte positiva de la tecnología de grabación actual es que trae posibilidades inmensas para un rango muy amplio de gente, y por ello hay artistas muy valiosos que sin esta tecnología accesible posiblemente nunca hubiéramos podido escuchar. A final de cuentas existe una línea muy delgada entre la preparación de un ingeniero en audio y la experiencia que tenga para desempeñar mejor su trabajo”.

¿Al momento de hacer tracking tienes alguna preferencia por alguna frecuencia de sampleo en particular?

“Hace tiempo que aprendí primero a preguntar cuál será el destino de la grabación y dependiendo de eso será la resolución a grabar. Tengo una consola análoga, por ello no mezclo desde la computadora. Pero si yo no voy a mezclar y se hará en otro lugar, yo necesito estar segura de que para quienes trabajarán sobre la grabación les será beneficioso el sample rate que trae. Si se trata de un CD que yo misma mezclaré, entonces grabo a 24 bits y 88,200 Hz, porque así se puede bajar a 44,100 de una manera matemáticamente mas pura”.

¿Nos puedes compartir sobre tu enfoque de microfonear cuando grabas orquesta para alguna película?

“Realmente todo se enfoca en el director de la orquesta y el compositor. Todo está escrito en la partitura y mi trabajo es el de traducir lo que está escrito al momento de que salga por los altavoces. Yo trato de tener los micrófonos correctos para cada trabajo; generalmente antes de la grabación hablo con el cliente y trato de averiguar qué tipo de sonido está buscando. Realmente no pretendo alterar nada ni agregar sobre lo que está escrito. Hablando un poco sobre microfonía, a veces uso micrófonos de condensador para el Decca Tree y luego uso de bulbo para cada una de las secciones. También depende del tamaño de la orquesta y también depende el tipo de sonido que el cliente quiere. A veces es a la inversa, uso micrófonos de bulbo para el cuarto y de condensador en las secciones”.

¿En tu experiencia, cuál es para ti el instrumento solista más difícil de grabar?

“Definitivamente con el que he pasado mucho tiempo trabajando para poder sacar un buen sonido es con el fagot, porque en el contexto de una sección de madera y de la orquesta, las llaves de este instrumento se escuchan mucho. También depende de la forma en la que está escrita la música; cuando está como solista junto con la orquesta es difícil hacer que se mezcle bien. Hay compositores que lo ponen en el registro del sax tenor y eso hace que el fagot sobresalga demasiado con un sonido incisivo”.

¿Qué retos has tenido al ser directora de grabación y scoring en Skywalker Sound?

“Definitivamente el gran desafío ha sido tener ambos trabajos. Me refiero a hacer la función de logística como directora de grabación y también la de ingeniera de audio en el scoring stage. Como estoy en el estudio es más difícil hacer la parte administrativa que consiste en mandar y contestar correos, así como mandar contratos y presupuestos. Por otra parte, ha sido una bendición que yo sea quien esté haciendo ambos trabajos, porque de esta forma no necesito buscar a la otra persona para preguntar sobre cosas administrativas. Otra de las ventajas es que sólo tenemos una sala de grabación y eso hace más práctico todo”.

Finalmente, ¿qué consejo darías a los jóvenes que están interesados en el área de la grabación de música para cine?

“Es muy importante salir y escuchar mucha música, sobre todo escuchar la de tipo orquestal. También es trascendental entender cómo funcionan las diferentes secciones de una orquesta, para lo que se debe hacer. También recomiendo para la gente que quiere meterse a grabar música para cine, que busquen un joven director o un compositor con quien puedan estar en contacto y así saber cómo se hace, ya que inclusive la terminología que se utiliza para grabar este tipo música es un lenguaje muy diferente. Fue de mucha utilidad para mí tomar clases y entender sobre la producción, diseño sonoro y foley, entre otras cosas.